Cuando Dios: así lo quiera, eso es lo que quiero
cuando mis dignos pensamientos; así lo quieran,
dejaré de pensar en mis tentaciones,
para liberar mi alma de este… mi pecado.
-*-
Llegaste como la divina luz de mi día,
te miré y te miré… pero jamás te dessié
para mi solo fuiste mi secretaria.
-*-
Fue ese día, en que todos se abrazan
al mirar tu cara, algo escondías,
a mis brazos te apretabas y a mis ojos
tu lasciva mirada me penetraba.
-*-
Tu suave y cálida mejilla en mi se posaba,
giraste tu cara y nuestros labios se encontraron
fue ese beso... todo mi pecado,
de mi pedestal de serio, de ahí me sacaste.
-*-
Siempre te miré pero hasta ese día,
tu cuerpo para mi debía ser.
Insinuante llena de calor, a mis brazos llegaste,
en sábanas blancas ahí tu cuerpo recosté.
-*-
Hicimos el amor… hasta que el reloj marcó el adiós
llena de lujuria... me gritabas tu callado amor,
el que de siempre de ti sospechaba,
hoy tus garras no se como quitarlas.
-*-
De jefe a amante, hay bastante distancia,
mañana cuando te vea, no sabré como llamarte...
señorita… o ven a mis brazos amada mía…
aquí te espera tu amante.
-*-
SACARIAS
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